sábado, 2 de enero de 2010

Carta al Rector.

Estudiantes Escuela de Criminalística Forense Utem



Señor Rector,
Don Luis Pinto,
Presente;


Lamento profundamente que sea este medio el único que me queda para poder comunicarme con usted, seguramente tampoco leerá este correo que será filtrado por quienes están destinados a hacerlo. Pero me queda la tranquilidad de que la posterior difusión de este mensaje, llegará tarde o temprano a su destino.

Ojala aquel saludo que he abierto en mi correo de parte de esta rectoría, nos incluyera a nosotros, pero solo me ha quedado claro que una vez más no somos parte de esta universidad ni de los buenos deseos de aquellos de quienes dependemos. Las malas noticias no se hacen esperar y además llegan en momentos en que el amor y la tranquilidad debería reinar en nuestros hogares, para celebrar estas fiestas de fin de año.

No es así, y nadie se ha detenido a pensar en que una comunidad completa, estudiantes (700) profesores (los pocos que quedan) y administrativos (personas fieles y entregadas) no merecen este descanso y celebración hace más de dos años.
El año anterior la rectora subrogante del momento hizo exactamente lo que ha hecho usted, despidiendo a nuestras personas de confianza sin previo aviso y en una época que le duele a cualquiera, nuestra respuesta fue la unidad y la fuerza para demostrar que no pueden pasarnos a llevar de esta forma y resultó positivamente solo por un tiempo, hasta que llegara usted...

Usted que demostró congoja cuando en el debate con el señor Olivares, se le comentó de nuestros profesores sin pago,
Usted que cuando le hablamos de nuestros laboratorios abandonados, no
lo pudo entender,
Usted que expresó delante de más de doscientas personas que nuestro conocimiento es válido y respetable y debe ser continuado,
Usted que antes de ganar prometió lo básico para nuestra continuidad y respeto, y es Usted quien hoy no nos da respuesta y no nos abre la puerta como lo hizo antaño el señor Miguel Avendaño.

Le recuerdo señor que esta universidad que usted tanto ama ya que es parte de su creación fue salvada de ese señor que le he mencionado por la valentía de los estudiantes que unidos en la desesperación, nos vimos obligados a provocar su salida por la fuerza.
Criminalística en ese entonces fue parte activa del movimiento estudiantil
con gran liderazgo y con una huelga de hambre incluida.
Que es lo que espera hoy de nosotros?
Pues le cuento que la fuerza es parte de nuestros conocimientos y de la supervivencia y aun podemos hacer mucho más...

Sea honesto y honorable como usted dice, señor rector y de la cara...
Si lo que usted quiere es matarnos de una vez por todas, dígalo con todas
sus palabras y no intente dejarnos en el silencio más absoluto acompañado de la indiferencia (creo que esto no forma parte de su estilo o filosofía de vida). Somos seres humanos que merecemos respeto y que esta universidad no nos ha dado, solo ha usufructuado de nuestros recursos entregados y además existe solo porque la entrada desmesurada de estudiantes de nuestra escuela que destapó un conflicto nacional, fue lo que salvó a esta casa de estudios. Que paradoja! tal como el cáncer en su ADN contiene la respuesta de la vida eterna, nosotros somos el cáncer de esta universidad que les dió de comer a todos y es así mismo como no nos podrán matar de ninguna forma!

Hoy nuestra noticia fue buena desde la Corte Suprema, la Utem ya no debe pagar cuatrocientos millones por culpa de Criminalística... o por culpa de la misma universidad?

Pero no podemos disfrutar...nada.
No se olvide señor rector, somos más de seiscientos estudiantes y no podemos depender de tres personas y tampoco olvide que fueron solo doscientos los que sacaron a Miguel Avendaño.

Un año sin pago a nuestros profesores...
Los laboratorios sin recursos necesarios...
Los estudiantes sin el resguardo de la universidad a la que pertenecen...
Los trabajadores pasados a llevar de la forma más indigna que existe...

Sabemos y entendemos de la situación económica de esta universidad, pero no es nuestra responsabilidad, sin embargo si somos nosotros responsabilidad de ustedes les guste o no y eso tendrá que entenderse aquí o en la comisión nacional de acreditación.
Las instancias superiores de educación, ya no son nuestro tema ya tuvimos experiencia en ellas y no tenemos más tiempo que perder, así que como se lo mencionáramos a la ex rectora y su equipo jurídico, solo nos queda un recurso de protección especialmente redactado en contra de la universidad que nos puede hacer desaparecer de una vez por todas o nos puede hacer reconocidos por el tribunal más alto de este país.
Este recurso existe hace meses en nuestro escritorio redactado por excelentes abogados y además de mucha trayectoria de los cuales me reservaré el nombre (hoy uno es diputado electo), pero usted seguramente sabrá de quienes hablo.

Con mucho más que decir, me despido con profundo dolor en el corazón de mi dirigencia y de mis representados, pero con más fuerza que nunca por que el dolor es quien enseña y fortalece y no olvida jamás a quienes lo poseen.

¡Feliz fin de año señor rector!
A usted y a quienes lo acompañan, se lo deseo de parte de los olvidados que celebraremos en el futuro nuestro reconocimiento, por que el tesón, la valentía y la honorabilidad están de nuestra parte.


Atentamente y esperando respuesta a la brevedad;